Hoy quiero compartir con vosotros una poesía que escribí allá por los últimos años del s XX ¡tan lejano, pobre! En estos versos se nota que estaba bastante deprimida, pero creo que ya vislumbraba mi futuro. Desde luego, las últimas preguntas las tengo más que respondidas.
En fin, espero que os guste:
Feliz de sentirme tan viva
he de agradecer al mundo su singular ayuda.
Su imparable tesón. su dolor, su arrepentimiento,
su llama siempre encendida.
Deseo, sin más razones,
conseguir lo que mi alma gritando implora,
aunque mi cuerpo sólo busque vanas inquietudes.
Si aquí me has dejado, ¡Oh, Dios!
¿Cuánto camino he de andar, cuántos rostros he de volver hacia ti, cuánta paz he de sembrar en la tierra,
si aquí me has dejado, oh Dios?
La poesía sigue, pero esto es para mí. lo más bello.
Y además ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡me cansé!!!!!!!!!!!!!!!!!
Mañana, el final.